El exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), José María Enríquez Negreira, está siendo investigado por supuestamente dar instrucciones a los árbitros antes de arbitrar partidos del FC Barcelona. Según la Fiscalía, el Barcelona habría pagado al exvicepresidente del CTA 7,3 millones de euros para que llevara a cabo acciones en favor del club en la toma de decisiones de los árbitros y en los resultados de las competiciones.
Fuentes arbitrales consultadas han revelado que Negreira organizaba reuniones previas a los partidos en un bar de Barcelona llamado “La Torrada”, que era regentado por su pareja. En estos encuentros, el exvicepresidente del CTA daba instrucciones y directrices a los árbitros que iban a pitar los partidos del FC Barcelona y el Espanyol. También se celebraban reuniones con árbitros del Comité Catalán donde Negreira comentaba sus calificaciones de la temporada.
Según estas fuentes, Negreira tenía un gran poder en el CTA y controlaba todos los documentos, informes y calificaciones de los árbitros. Además, los árbitros de Primera División se veían obligados a visitar el bar de Negreira ya que era su jefe. También denuncian que los árbitros se veían forzados a contratar los servicios de coaching del hijo de Negreira.
“La Torrada” era un bar modesto donde se llevaban a cabo estas reuniones. Los árbitros recuerdan que la comida no era de buena calidad y que cada uno debía pagar aproximadamente 35 euros.
El local “La Torrada” cerró después de 4 o 5 años y fue reemplazado por un restaurante asiático de tapas.
En el marco de este caso, el Juzgado de Instrucción nº 1 de Barcelona está investigando el pago del FC Barcelona a Negreira y las presuntas actuaciones ilícitas llevadas a cabo en favor del club.
Fuentes:
– Libertad Digital