Nos encontramos en nuestro camino de vacaciones y, de repente, el GPS del teléfono móvil muestra el trayecto con una línea naranja o roja en lugar de verde. Hemos encontrado retenciones de tráfico, y esto ha sido marcado con precisión por aplicaciones como Google Maps, Mapas de Apple o Waze. ¿Cómo pueden predecir con tanta exactitud la velocidad de circulación o la presencia de atascos? La clave está en los propios usuarios y en la información que envían, a veces sin saberlo, a estos servicios.
En el caso de Google Maps, una de las aplicaciones de mapas más populares en el mundo, utiliza inteligencia artificial y técnicas de aprendizaje automático para analizar los patrones históricos de tráfico en carreteras. Combina este conocimiento con la información en tiempo real que envían los teléfonos móviles que se encuentran en la carretera, mostrando la ubicación y la velocidad de circulación de forma anónima.
La aplicación Mapas de Apple, que viene instalada por defecto en los iPhones, ofrece seguimiento de tráfico en carretera al seleccionar la navegación en coche o satélite y establecer una ruta. Muestra los tramos con tráfico fluido en azul, los lentos en amarillo y las retenciones en rojo. Además, los conductores pueden informar de problemas en la carretera, como atascos o accidentes, a través de Siri, sin necesidad de tocar el dispositivo.
Por su parte, Waze cuenta con más de 150 millones de usuarios activos al mes, de los cuales 50,000 son voluntarios que colaboran para mantener los mapas actualizados. Estos voluntarios reciben los reportes de la comunidad y los actualizan en tiempo real, permitiendo que la aplicación muestre avisos de retenciones y accidentes al indicar una ruta o explorar un mapa.
Estas aplicaciones son capaces de predecir la velocidad de circulación y detectar atascos gracias a la información proporcionada por los usuarios y a la combinación de algoritmos y técnicas de análisis de datos en tiempo real. Con esto, brindan a los usuarios una navegación más eficiente y les ayudan a evitar el tráfico y los posibles retrasos en sus desplazamientos diarios o durante sus vacaciones.